martes, 23 de noviembre de 2010

Compilado Sorpresa!

Ya salió, ya salió!
El prometido Compilado Sorpresa de Fly Reviews!


Lo pueden descargar de acá:
http://www.mediafire.com/?77zn1x08fn2m6b4
[son 63 MB en un Zip]


Preguntas Frecuentes:

¿Qué onda con este compilado?
Es un compilado con temas finamente seleccionados por el autor del blog. Presenta una variedad diversa de temas disparejos para entretenimiento del oyente.

No entendí nada... ¿Qué es esto?
Un compilado con temas surtidos para que escuches.

Pero que onda... ¿Son temas tuyos?
No, son temas de distintos artistas diferentes.

¿Qué estilos hay?
Es música como la que escuchás en la radio... pero mejor.

¿Y para qué hiciste esto? ¿Por qué me lo debería bajar?
Como dije en otro post, la idea de este compilado es que pueda servir para un futuro CONCURSO con premios posta y toda la bola.
Todo esto es para buscar promocionar el blog y así tener más visitantes.

Ah grosso! ¿Cuándo se larga eso del concurso?
Todavía no lo arranco por falta de visitantes al blog. Cuando vea que el compilado se lo bajó bastante gente, largo las bases del concurso (que ya hice) y vemos que onda eso de los premios.

¿Y por qué decís que es un "Compilado Sorpresa"?
Porque la idea es que no sepas que temas tiene hasta que lo bajás :p
En total son 19 tracks pero no llega a completar una hora de duración.
Otra razón de no publicar el contenido es que no estoy pagando ningún tipo de copyright por subir temas ajenos :p

Che pero es medio raro todo... ¿no tendrá un virus esto?
Los temas están en un ZIP, y es todo MP3. Si desconfiás pasale el antivirus... y sino no te bajés nada de internet viste... bien que te bajás discografías de taringa sin preguntar nada.

¿Y si no me gusta?
Me puteás.

Buen me voy a fijar y te cuento...
Joya.

martes, 9 de noviembre de 2010

Las Discográficas

Les traigo un articulo que había hecho en un antiguo blog llamado "Soy la música", que a su vez lo había hecho con info de otros sitios.
El tema a tratar es el objetivo existencial de las discográficas en del mundo, y como afectan la música.
Por si no sabían mucho del tema, esto explica un poco porque la "música vieja" nos la retratan como algo fuera de moda... y la nueva como "lo mejor" (jaj), como todas las barrabasadas que se hacen "en nombre del rock".

El texto es largo pero vale la pena. Si sienten pasión por la música y quieren entender porque ya no pasan tanta música variada en la radio, esta es la respuesta:




¿Para qué sirven las discográficas y las gestoras colectivas?


Cuando las gestoras colectivas de derecho de autor y las discográficas alertan que la copia digital amenaza a la música, están apostando a confundirnos. La industria discográfica como la conocemos (y otras asociadas) están en problemas, sí. Pero la música y la industria discográfica son cosas muy distintas, y en entornos digitales la música bien puede florecer y difundirse sin necesidad de la industria.

Industrias que vienen, industrias que van
Mi padre me cuenta que, cuando él era chico, la heladera de la casa era a hielo. Esencialmente, era un armario recubierto de aislamiento térmico, en el que guardaban los alimentos. Producir hielo era una actividad industrial, que sólo se podía encarar utilizando equipos pesados, fuera del poder adquisitivo de los particulares. Así, todos los días venía un señor con una barra de hielo al hombro que se metía en la heladera, en una escena que se repetía en miles de hogares.

Todo el mundo compraba hielo, todos los días. Pero en realidad, no era hielo lo que necesitaban, sino frío. El hielo era sólo un vehículo para entregar frío a los clientes que lo necesitaban. Cuando aparecieron en el mercado primero las heladeras a kerosén, y luego las eléctricas, las familias se encontraron con que podían adquirir una máquina que les proveía del frío que necesitaban de forma confiable, cómoda y barata. Estos aparatos no sólo no necesitaban hielo para funcionar, sino que incluso estaban en condiciones de producir su propio hielo.

A nadie sorprendió que las ventas de hielo, antes un producto de primera necesidad, cayeran estrepitosamente. La industria del hielo colapsó, y sólo sobrevivieron unas pocas productoras que se dedicaron a satisfacer necesidades especiales, en particular provisión de hielo en cantidad o calidad distinta de la que puede producir una heladera doméstica.

Sin embargo, aún en medio del colapso, a nadie se le ocurrió la absurda idea de imponer un gravamen a las heladeras domésticas para compensar a la industria del hielo por las ventas perdidas. La industria del hielo había cumplido su ciclo, su mercado había desaparecido. Había provisto un servicio útil a la sociedad, y en ese proceso había servido como fuente de sustento a muchas personas. Pero el servicio ya no agregaba suficiente valor en el nuevo contexto tecnológico, y los proveedores de hielo reconvirtieron su negocio, o se dedicaron a otra cosa.

Industrias que no se quieren ir
El paralelo con la industria discográfica no es difícil de trazar. De la misma manera que la gente no quería realmente hielo, sino frío, no es discos lo que el público quiere, sino música. Mientras el único soporte práctico para la música fue el disco (permítaseme la generalización de llamar “disco” a todos los soportes físicos de sonido, desde los tambores de Edison a los CDs), no había manera de conseguir música si no era en un disco. Pero las computadoras, los reproductores digitales y, muy especialmente, Internet, cambiaron el paisaje tecnológico, desacoplando a la música de su soporte.

Hoy, que la música puede codificarse y transmitirse fácilmente sin necesidad de un medio físico, ya nadie quiere comprar discos y por muy buenas razones: son incómodos de adquirir y almacenar, a veces se agotan, ocupan espacio, se rayan, se pierden, te los roban, necesitás un aparato especial y frágil para leerlos… El formato digital es mucho más eficaz, cómodo y barato. Tal como la heladera puso a quienes antes compraban hielo en condición de producirlo, la computadora pone en manos de los particulares la posibilidad de producir su propia música, duplicarla, distribuirla.

Igual que con la del hielo, nadie debe sorprenderse de que le empiece a ir mal a una industria que produce algo que nadie quiere comprar. Sin embargo, a diferencia de la industria del hielo, las discográficas se niegan a aceptar que su función social expiró, que lo que antes era un servicio útil hoy no es más que una carga para la sociedad. En vez de reconvertir su negocio, en vez de buscar de qué manera ofrecer su producto de modo que la gente quiera comprarlo, prefieren hacer lobby ante los legisladores para forzar a los consumidores a entregarles su dinero, independientemente de si quieren hacerlo o no.

Mal acostumbrados
El dicho popular asevera que la culpa no es del chancho, sino del que le da de comer, y es aplicable a este caso. La codicia de la industria discográfica fue alimentada durante décadas mediante leyes que la hacían acreedora (a través de organismos como SADAIC, AADI, CAPIF, ARGENTORES) de cualquier actividad cultural en la que se usara música, independientemente de si la música era de autores o intérpretes que formaban parte de la industria o no. Cuando uno está acostumbrado a sacar tajada de lo que hacen otros, no es raro que quiera extender el campo del que la saca. La propuesta de dar a las gestoras colectivas el derecho a recaudar un “canon digital” no es otra cosa que un intento de apropiarse de una tajada del negocio de las computadoras, elevando arbitrariamente los costos para todo el mundo (particulares, empresas, hospitales, escuelas, universidades, bibliotecas, artistas, administración pública) a exclusivo beneficio de un sector industrial.

Es hora de repensar el modelo de distribución cultural. Mientras la producción industrial de libros y discos era la única alternativa viable, el sistema actual puede haber tenido su justificación aunque también sus serios problemas. El más grave de ellos no es siquiera el enriquecimiento desmedido de algunas personas, sino el control corporativo acerca de cuáles expresiones culturales se difunden, y cuáles no. Un mercado de la música con bajos costos de producción y sin corporaciones puede resolver estos inconvenientes, permitiendo el surgimiento de una cultura más diversa, en la que las expresiones locales tengan mejores chances de ser conocidas y difundidas, como muestra la experiencia del Tecnobrega en el nordeste brasileño.

Durante siglos, hemos delegado la difusión de la cultura a las empresas, porque no teníamos más remedio. Hoy podemos elegir, y es hora de que recuperemos la cultura para toda la sociedad.


Fuente:
http://www.vialibre.org.ar/2009/02/13/%C2%BFpara-que-sirven-las-discograficas-y-las-gestoras-colectivas/



... y de yapa, algo que también encontré en otro sitio, la tarta del CD en España:

Así se reparte el dinero de un disco de 18 euros según AFYVE (la asociación de discográficas españolas).

* IVA 16%: 2'49 euros.
* Tienda 40'2 %: 7'25 euros.
* Discográfica un 24'4%: 4'41 euros.
* El distribuidor un 4%: 0'73 euros.
* La fabricación un 4%: 0'73 euros.
* Derechos de autor un 4%: 0'73 euros.
* Royalty para el artista 9'4%: 1'69 euros.

A juzgar por estas cifras de las discográficas, los músicos –si son a la vez autores e interpretes– reciben aproximadamente el 15% del precio de portada de cada CD. Sin embargo, pocos son los que pueden aspirar a estos porcentajes.

La mayoría de las discográficas multinacionales suelen firmar a sus nuevos artistas por un período de cinco discos. El royalty de estos primeros contratos suele ser de sólo el 8% –no del 9,4%– y muchos sellos incluyen cláusulas que rebajan esta cifra hasta el 3% en caso de que los discos se vendan durante una campaña de promoción televisiva o a precio de oferta. Sólo los artistas que negocian contrato desde una posición de fuerza –después de entregar sus primeros cinco LPs– pueden conseguir un royalty más elevado. Este porcentaje, además, se calcula sobre un precio inferior al de venta en las tiendas.

El 4% del dinero del CD que se destina a los derechos de autor tampoco llega íntegro al bolsillo del compositor. La SGAE cobra de media un porcentaje del 15% del total recaudado en concepto de gestión. Además, la mayoría de las discográficas obligan a sus músicos a firmar con su empresa editora que se queda con la mitad –a veces más– de los derechos de autor. Algunas radiofórmulas utilizan el mismo método para cobrar a través de una editora musical por la promoción. Al final, el 4% se reduce a menos de la mitad. Con estos matices, el porcentaje real que reciben los músicos en España de cada disco vendido rara vez supera el 8%. El 7% restante hasta alcanzar el 15% se reparte entre discográficas, editoras y la SGAE.

jueves, 4 de noviembre de 2010

Gentle Giant

Gentle Giant es una banda de rock progresivo inglesa que nació en 1970 y terminó en 1980... por lo cual podríamos aseverar que fue una banda MUY de los '70... ¿verdad?... buen, le quiero poner onda che.

Los tipos tenían maso estas caripelas:


Me mata la cara del último de la derecha... todo un dandy.
Eran cinco ahí, pero en un momento creo que eran más. Había de todo: violín, guitarras, muchos teclados, MUCHAS voces cantando al mismo tiempo... a veces entraban instrumentos de viento, otras tanto había xilofones. Linda banda la verdad.

Al principio hacían un rock progre muy convencional, muy de conservatorio, y la verdad no recomiendo escuchar lo del principio (que suena bien pero es medio embole). Recién el cuarto disco "Octopus" de 1972 es una locura así mal. Les agarró una onda piratesca, como si todos fueran marinos al estilo Jack Sparrow, borrachos y mal de la cabeza. Es un disco rarísimo ese, mirá te tiro un tema para que escuches:



Hasta acá los tipos la limaban mucho, y si no bajaban un cambio no los iba a escuchar ni la jermu.
El quinto disco entonces es mucho más tranca y se llama "In a Glass House". Suena muy bien, pero a mi me embola, que se yo. Vos fijate que onda, la crítica lo pone entre los primeros mejores. La tapa de ese disco es así mirá:


Lo que me gusta mucho de esta banda es que las tapas de los discos son un FIEL reflejo de lo que contienen adentro. Así que si contás con mucho poder de abstracción sonoro/visual, entenderás por ahí a que me refiero.

Los tipos seguían siendo una cosa así de culto, pero eran ya un referente del rock progre. La cosa cambia un toque cuando sacan este otro disco:


La seguían limando los chabones, pero era más funky y más movido todo esto. Ahí se ganaron el respeto del consumidor promedio, quien le embola escuchar música estructurada y alargada como Feliz Domingo. Acá loco... y es ACÁ que los tipos de plantan y dicen "loco compren nuestros discos la ptmqlp's que somos unos zarpados del recarajo", y lo demuestran bien en este disco.

Así que hacen un segundo intento de seguir esto por el buen camino... oh si, y es de esta forma como sale el próximo disco llamado "Free Hand":


Este disco no puede ser mejor porque ya sería demasiado. Como de costumbre, en estos años salían discos GROSSÍSIMOS, opacados por otros discos GROSSÍSIMOS. Pensá que "Free Hand" es de 1975, y el mismo año sale "Wish You Were Here" de Floyd, "Red" de Crimson, "One Size Fits all" de Zappa... ¿cómo iban a ser conocidos estos chabones, explicame?.
"Free Hand" es entonces, a mi gusto y piacere, el mejor disco de Gentle Giant. Es considerado un referente del rock progresivo y si no lo escuchás viene Alfredo Rosso por la noche y te taladra el cerebro con reseñas de la banda hasta que te sangre el oído.
Así que escuchalo:
http://www.mediafire.com/?qktmmnjlhzt (98mb, calidad 320 kbps)

Después la banda se da cuenta que esto de volverse más comercial es copado. Sí, es MUY copado pero empiezan a zarparla. Viene en 1976 un disco que se llama "Interview" que no le gusta a mucha gente, disco muy similar a "The power and the glory" pero reciclado. Hacen un intento de volcarse al innovador y reciente punk rock con "The Missing Piece" de 1977, disco con temas mucho más simples pero con toques progre que, a mi gusto, hacen de este un disco balanceado, rockero y entretenido:


A este punto, Gentle Giant dejaría de ser solo una banda de rock progresivo. Ahora es una banda de radio con temas hiteros, cancheros, buena onda. Pero los viejos fans empezarían a putearlos... bueh no tanto, pero si les pierden cierto respeto.
A mi gusto, la banda acá dice "eramos unos snobs de mierda loco", y cuando vieron a Johnny Rotten putear a la reina se quisieron sumar.

Hasta acá todo bien, Gentle Giant fue una banda del carajo con temas impresionantes.
Parece que sacaron dos discos más en 1979 y 1980 que todavía no escuché. Son más tirando a punk y no les gusta a nadie... no existen buenas críticas de esos discos, pero no perdés nada en bajarlos y escuchar que onda.
Después los tipos se separan porque ya la habían cagado lo suficiente, y porque los '80 son una bosta al lado de lo que eran los '70. Génesis se atrevió a conocer los '80 y ya sabemos como terminó todo.

Para cerrar todo este artículo les dejo un tema del último disco de Gentle Giant. Se llama "Civilian", salió en 1980 y lo mejor del disco es la tapa; tiene un diseño muy original viste:


Bueno me fui, tengo que seguir con mis experimentos para continuar mi teoría de la cuarta dimensión... ¿sabías que si pudiéramos viajar por una dimensión más perteneciente al "hiperespacio" podríamos teletransportarnos a cualquier parte? Creeme que va a funcionar así, acordate!

-Fly